Cuando nos ponemos a preparar la cena probablemente tengamos más problemas al sumar las kilocalorías que suma tal o cual alimento o en el propio hecho de elegir éste o aquel alimento que nos vendrá mejor para una cena equilibrada y que no perjudique a nuestro cuerpo.
Por eso, y para ayudar a construir una cena saludable, en este artículo vamos a proponer un primer plato sano, con poco contenido calórico y que suplirá esas ganas de tomar un plato caliente que en algunos momentos nos puede pasar al estar a dieta. Y para todo ello hablaremos del caldo de pollo.
El caldo de pollo es un alimento que nos vendrá muy bien para cenar debido a que es muy ligero, fácil de tomar, libre de grasas y con esa particularidad, como hablábamos antes, de ser un plato caliente que nos sentará de maravilla en las frías noches que estamos sufriendo.
Para hacerlo puedes seguir una de las cientos de recetas que pululan por Internet, teniendo en cuenta que sólo debe llevar verduras y pollo, evitando añadir otros tipos de condimentos que nos den un resultado final muy parecido al de un concido.
Pero si prefieres, también puedes encontrar en el mercado una alternativa muy sana y que igualmente nos seguirá viniendo de maravilla a nuestra dieta, y es el caldo de pollo de la marca Aneto.
Con sólo 6,7 kcal. por cada 100 ml (una taza podría tener por tanto unas 13 kcal.), el caldo Aneto, lejos de hacer publicidad, es una de las marcas que mejor nos vendrá al elaborar nuestra dieta.
Podemos encontrar en los supermercados otras alternativas como Gallina Blanca, o cualquier marca blanca, probablemente más baratas, pero que su composición, a parte de tener más kilocalorías, también tendrán más grasas, e incluso, en algunos casos, tienen cierto porcentaje de cereales, que según qué dietas deberemos evitar, y más si lo tomamos por la noche.
Por tanto, si no sabes qué tomar en la cena, empieza calentándote una taza de caldo de pollo, que del segundo plato hablaremos más adelante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario